Vivimos en un mundo de contrastes y más allá de las
anécdotas de las estadísticas, la realidad es que una parte importante de la
población mundial está desnutrida o tiene sobrepeso. Esta bipolaridad deja en la
zona media, o normal, a una porción de la población que no es, como se
esperaría, la gran mayoría.
Figura 1.- Sobrepeso y Desnutrición son los extremos de un mundo nutricionalmente desequilibrado |
Cuando aún 868 millones de
personas en el mundo (12 % de la población) padece desnutrición, según datos de
la Organización Mundial de la Salud (OMS, periodo 2010-2012), es poco menos que
paradójico que otros 1.400 millones tengan exceso de peso (mayores de 20 años,
datos de 2008, OMS). Y no sólo eso, sino que 40 millones de niños menores de 5
años en todo el mundo ya tienen este mismo problema.
Figura 2.- Prevalencia de Desnutrición (%) en el periodo de 2010-2012 según datos de la Organización Mundial de la Salud. Gráfica tomada de FAOSTAT. |
Números a parte, la cruda
realidad es que no habiéndose resuelto aún el
problema de la desnutrición, ya tenemos otro bien arraigado: el
sobrepeso. Y es que los datos de prevalencia de sobrepeso y obesidad en el
mundo que proporciona la OMS correspondientes al año 2008 son impresionantes.
En toda Europa, incluida España, entre el 40 y el 60 % de la población de más
de 20 años tiene exceso de peso. Estas cifras aún son mayores en Norteamérica.
De modo que, mirando el mapa mundial, aquellos países con altos recursos
económicos son quienes tienen mayor incidencia de sobrepeso. No parece, pues,
que un mayor desarrollo lleve asociado necesariamente una mejor elección de la
alimentación y de los hábitos de vida. Algo está fallando sin duda.
Figura 3.- Prevalencia de sobrepeso en individuos de más de 20 años (ambos sexos). Datos de la Organización Mundial de la Salud de 2008. Gráfica tomada de la Organización Mundial de la Salud (enlace). |
DEFINICIÓN
Contrario a lo que habitualmente
se entiende por obesidad, de la que se habla en términos de peso (Kg), en realidad
la obesidad es el exceso de grasa corporal. Esto suele llevar asociado un
aumento del peso corporal, aunque no siempre sucede así. Vayamos por
partes.
En términos prácticos y, especialmente, para el estudio de
poblaciones, se utiliza el Índice de Masa Corporal, lo que constituye una
simplificación que asume que el exceso de peso se debe a un exceso de grasa.
Esto, obviamente no siempre es así, puesto que la masa muscular y la grasa no
son equivalentes, siendo la primera más pesada que la segunda. Por esta razón,
una persona con gran desarrollo muscular (deportista) puede presentar un peso
elevado, con poco porcentaje de grasa corporal. En este caso no se podría
hablar de sobrepeso. El IMC tampoco sería aplicable a mujeres embarazadas y en
determinadas situaciones médicas.
Figura 4.- Fórmula del Índice de Masa Corporal (IMC) |
Tal y como se puede observar en
la fórmula, el IMC sólo tiene en cuenta el peso y la altura, sin mención alguna
a la grasa corporal. Para ADULTOS SANOS, se establece una clasificación según
el valor del IMC. Para las personas mayores se establecen otros valores de
referencia.
Figura 5.- Clasificación del Índice de Masa Corporal para adultos sanos. |
Ésta es la clasificación que
suele utilizarse con mayor frecuencia; sin embargo, la OMS aplica el término
‘sobrepeso’ cuando el IMC es igual o superior a 25, por lo que incluye aquí también
los valores de obesidad. El intervalo entre 25 y 29.9 lo denomina ‘pre-obeso’.
Es esta clasificación la que debe tenerse en cuenta para interpretar los mapas
anteriores. En realidad se trata de diferencias menores, que no afectan ni a la
gravedad ni al tratamiento de la problemática y que deben tenerse en cuenta
para no generar confusión entre los términos.
Figura 6.- Clasificación del Índice de Masa Corporal para adultos sanos según la Organización Mundial de la Salud (OMS). |
En ambas clasificaciones
equivalentes, debe hacerse una puntualización. En la práctica, se suele emplear
como límite inferior de la ‘Normalidad’ el valor de 20 en lugar de 18.5.
Una sub-clasificación permite
distinguir además, tres tipos de delgadez y otros tres grados de obesidad.
* Delgadez
Leve.-
IMC entre 17 y 18.4
Moderada.-
IMC entre 16 y 16.9
Extrema.-
IMC inferior a 16
* Obesidad
Grado
I.- IMC entre 30 y 34.9
Grado
II.- IMC entre 35 y 39.9
Grado
III.- IMC igual o superior a 40
¿POR QUÉ ES NECESARIA ESTA CLASIFICACIÓN?
Como se ha comentado anteriormente, el IMC se emplea
principalmente en estudios de población. Gracias a estos estudios sabemos que
las personas con exceso de peso tienen MAYOR RIESGO DE MUERTE. Ésta es la
verdadera razón por la que las instituciones sanitarias de todo el mundo
insisten en mantener unos niveles de IMC dentro del rango normal.
Los valores de riesgo de mortalidad de la siguiente gráfica
se han tomado de un trabajo publicado en 2010, en el que se incluyeron 1.46
millones de individuos, de entre 19 y 84 años (referencia 3). Al estudiar las
muertes durante un periodo de entre 5 y 28 años, los investigadores calcularon
el riesgo de mortalidad en función del IMC. Tanto en hombres como en mujeres no
fumadores, el menor riesgo de muerte se sitúa en el intervalo de IMC entre 20 y
24.9 (valores cercanos a 1). Datos similares se obtuvieron en otro estudio de
2009 con 900.000 personas (referencia 4).
Figura 7.- Riesgo de muerte según el valor del Índice de Masa Corporal (IMC) en mujeres de 19 a 84 años, que nunca han sido fumadoras. Gráfica construida con los valores tomados de la referencia 3 |
Figura 8.- Riesgo de muerte según el valor del Índice de Masa Corporal (IMC) en hombres de 19 a 84 años, que nunca han sido fumadores. Gráfica construida con los valores tomados de la referencia 3 |
De estas mismas gráficas se deduce también que valores de
IMC bajos tienen un riesgo aumentado de muerte. Comparando los números, el
riesgo es similar en el intervalo de IMC de 15 a 18.4 (delgadez) y de 30 a 34.9 (obesidad). Esto es
razón suficiente para que, como sociedad, hagamos una profunda reflexión
respecto de los cánones de belleza que empujan, especialmente a la mujer, a una
delgadez que pone en peligro su propia vida.
Referencias
1.- Organización Mundial de la Salud (OMS)
http://apps.who.int/bmi/index.jsp?introPage=intro_3.html
2.- FAOSTAT
3.- "Body-Mass Index and Mortality among 1.46 Million White
Adults". A Berrington de Gonzalez y otros autores. 2010. N Engl J Med, 363:2211-9. (enlace)
4.- "Body-mass
index and cause-specific mortality in 900 000 adults: collaborative analyses
of 57 prospective studies". Prospective
Studies Collaboration. 2009. Lancet, 373: 1083–96 (enlace)
Imágenes
- Figura 1.- La imagen representativa de la obesidad está
tomada de este enlace
La imagen
representativa de la desnutrición está tomada de este enlace
- Figura
2.- Gráfica tomada de FAOSTAT.
- Figura 3.- Gráfica tomada de la Organización Mundial
de la Salud (enlace).
- Figuras 7 y 8.- Gráficas
construidas con los valores que se incluyen en la referencia 3 (enlace).